HISTORIAS DE OGROS Y PRINCESAS: HOY CUENTO CON OGRO Y PRINCESA 3° A Y B SEÑO NATY .L



CUENTO CON OGRO Y PRINCESA 

AUTOR : RICARDO MARIÑO



Secuencia de actividades                                            LUNES 11 DE MAYO
1)Hace clic e el siguiente link para ver el cuento

https://www.youtube.com/watch?v=mAkSTNsxWVc                ( formato video)


FORMATO TEXTO


Cuento: CUENTO CON OGRO Y PRINCESA
Fue así: yo estaba escribiendo un cuento sobre una Princesa. Las princesas, ya se sabe, son lindas, tienen hermosos vestidos y, en general, son un poco tontas. La Princesa de mi cuento había sido raptada por un espantoso Ogro. El Ogro había llevado a la Princesa hasta su casa-cueva. La tenía atada a una silla y en ese momento estaba cortando leña: pensaba hacer “princesa al horno con papas”. Las papas ya las tenía peladas.
Es decir, había que salvar a la Princesa.
Pero no se me ocurría cómo salvarla. El cuento estaba estancado en ese punto: el Ogro dele y dele cortar leña y la Princesa, pobrecita, temblando de miedo. Me puse nervioso. Más todavía cuando el Ogro terminó de cortar, acarreó la leña hasta la cocina y empezó a echarla al fuego. En cualquier momento dejaría de echar leña y acomodaría a la Princesa en la enorme fuente que estaba a su lado. Agregaría las papas, un poco de sal, y zas, ¡al horno! ¿Qué hacer?
Se me ocurrió buscar en la guía telefónica. Descarté llamar a la policía (en las películas y en los cuentos la policía siempre llega tarde); tampoco quise llamar a un detective (no soporto que fumen en pipa en mis cuentos). Por fin, encontré algo que me podía servir:
“Rubinatto, Atilio, personaje de cuentos. TE 363-9569”
—Hola, ¿hablo con el señor Atilio Rubinatto?—Sí, señor, con el mismo.
—Mire, yo lo llamaba… en fin, por la Princesa…—¿Qué le pasa? ¿Está triste?
—Sí, más que triste. —¿Qué tendrá la Princesa?
—La van a hacer al horno. —¿Al horno?
—Sí, con papas. —¿Quién?
—¿Quién qué? —¿Quién la va a cocinar?
—El Ogro, ¿quién va a ser?
—Pero mire un poco. ¡Las cosas que pasan! Y uno ni se entera. Ya no se puede salir a la calle. Adónde iremos a parar. Casualmente, hoy le comentaba a un amigo que…
—Escúcheme, Rubinatto.
—Sí.
—Lo que yo necesito es que usted participe en el cuento.
—¿Qué cuento?
—En el que estoy escribiendo. Quiero que usted haga de héroe que salva a la Princesa.
—Bueno, no le niego que la oferta es interesante, pero, en fin, últimamente estoy muy ocupado. Tengo trabajo atrasado…
—¿Trabajo atrasado? —Claro. Tengo que hacer de sapo pescador que se transforma en sardina en un cuento que se llama “Malvina, la sardina bailarina”. Además, me falta repartir como treinta cartas en un cuento donde hago de “viejo cartero bondadoso”. Es un personaje muy lindo, todos los chicos lo quieren…—¿Piensa dejar que el Ogro se coma a la Princesa? Usted no tiene sentimientos. Es un monstruo.
—Ya le digo, ando muy ocupado. No sé, si me hubiera avisado con tiempo, lo hacía gustoso… Llámeme en otro momento.
—¡Qué otro momento! Si esperamos un minuto más, chau Princesita. Rubinatto, usted no puede hacer esto, qué pensarán sus admiradores…
—Es cierto…
—Van a pensar que usted es un cobarde, un…
—Está bien, está bien. Veré qué hago. No, usted tiene que decirme qué hago, ¿qué hago?
—Y… puede hacer de vendedor de manteles. Ahí está. Listo. Usted hace de vendedor de manteles. Llega hasta la casa del Ogro. Llama a la puerta. Cuando el Ogro abre, usted le da un par de sopapos. Después desata a la Princesa y escapan… ¿qué le parece?
—¡Ni loco! ¿De vendedor de manteles? De Príncipe o nada. Y al final, después que la salvo, me caso con ella.
—No, de vendedor de manteles.
—¡De Príncipe!
—¡Vendedor de manteles!
—¡Príncipe o nada!
—Está bien, haga de Príncipe… me va a arruinar el cuento, pero por lo menos salva a la Princesa.
Y llego en un caballo blanco y tengo una gran capa dorada.
—Sí, todo lo que quiera, pero apúrese porque si no…
—Y ahora la meto en la fuente y listo —dijo el espantoso Ogro, pellizcando el cachete de la Princesa.
En eso se escuchó que alguien gritaba fuera de la casa-cueva:
—¡Ehh! ¿Hay alguien en la casa?
¿Quién sería? El Ogro se asomó a la ventana. Vio que del otro lado de la verja de su casa-cueva había un tipo muy extraño montado en un caballo blanco. Llevaba una capa dorada, pero se notaba que se había vestido de apuro. Tenía la ropa mal puesta, la camisa afuera, una bota sin atar, y el pelo desprolijo.
—¿Qué quiere? —le preguntó el Ogro desde la ventana.
—Soy el Príncipe Atilio.
—¿Y a mí qué me importa? —contestó el maleducado del Ogro.
—Es que ando vendiendo manteles…
—Manteles, ¿eh?
—Sí. Tengo algunos en oferta que le pueden interesar. Lavables. Estampados. Confeccionados en fibras de tres milímetros. En cualquier negocio cuestan dos o tres pesos. Yo, el Príncipe Atilio, se lo puedo dejar en tres centavos.
El Ogro lo pensó. La verdad que no le venía mal un lindo mantelito. La cueva estaba hecha un asco. Y ya que se iba a dar un festín de “princesa al horno con papas”, ¿por qué no estrenar un mantelito si estaban tan baratos?
—Espere. Ya le abro —dijo por fin el Ogro.Atilio bajó del caballo.
Acá viene la parte de las piñas.
—Tomá. Agarrá el mantel —le dijo el Príncipe Atilio.
Cuando el Ogro lo agarró, le dio una trompada que lo hizo volar exactamente 87 metros y 34 centímetros. Pero el Ogro se levantó, arrancó un sauce de más de 3.600 kilos y se lo dio por la cabeza al Príncipe. Antes de que el Ogro saltara sobre él a rematarlo, el Príncipe agarró una piedra de más o menos cuatro mil kilos y se la tiró sobre el dedito gordo del pie derecho. El Ogro la esquivó y rápidamente hizo un pozo en la tierra de un metro y medio de diámetro y diez metros de hondo, para que el Príncipe cayera adentro.
Era una pelea muy dura.
El Príncipe, queridos lectores, desgraciadamente cayó al pozo.
El Ogro volvió contento a su casa.
Pero cuando llegó, la Princesa ya no estaba. La había desatado el caballo blanco del Príncipe. La Princesa subió al caballo y juntos fueron a sacar al Príncipe Atilio del pozo.
—Amada mía —le dijo el Príncipe Atilio desde allá abajo al reconocer el rostro angelical de la Princesa. —Amado mío —respondió la Princesa.
—He venido a salvarte —le dijo el Príncipe.
—¡Oh! ¡Qué valiente!—He venido por ti.
—Has venido por mí.—Pero si no me sacas de aquí, no podré salvarte.
—Oh, si no te saco de ahí, no podrás salvarme.—Amada mía.
—Amado mío.
—¿Por qué no se apuran un poco, che? —se quejó el caballo—. Va a venir el Ogro y este cuento no se va a terminar nunca.
Huyeron. Se casaron, fueron felices, pusieron una venta de manteles y nunca se acordaron del Ogro.

FIN
                                                                                                    


MARTES 12 DE MAYO

2) DESPUÉS DE VER EL CUENTO. COMPLETA LAS ORACIONES:

A)        LAS PRINCESAS YA SE SABE SON……………………………………………………………………………………..

B)        EL OGRO SE HABIA…………………......... A      LA ……………………. A     SU……………………………..

         C) EL OGRO SE LA IBA A COMER CON ……………………… AL …………………………………………………

D)       ATILIO RUBINATO ERA ……………………………… DE …………………………

E)        LA PRINCESA ………………………………………………AL PRINCIPE DEL POZO





 MIERCOLES 13 DE MAYO
3) COLOCA UNA X DONDE CORRESPONDA
DURANTE LA PELEA ENTRE EL OGRO Y EL PRINCIPE, ESTE LE DIO UNA PIÑA QUE HIZO VOLAR AL OGRO…


 
70 METROS Y 25 CENTIMETROS                      _____

87 METROS Y 35 CENTIMETROS                    ______

87METROS Y 34 CENTIMETROS                   ---------       

EL OGRO SE LEVANTO Y ARRANCO UN SAUCE DE MAS DE ….

3660 KILOS                                  ------

3600 KILOS                                  -----  

3060 KILOS                                  -----

EL PRINCIPE AGARRO UNA PIEDRA DE MAS O MENOS…

4000 KILOS                                  ----                   

2000 KILOS                                  __             

 4400 KILOS                                ___            



ESTA PIEDRA HIZO UN POZO DE…

   __         UN METRO, QUINCE DE ANCHO                            ___      UN METRO, VEINTE DE ANCHO                                 ___        UN METRO Y MEDIO DE ANCHO





 JUEVES 14 DE MAYO
4)Caracterizamos a los personajes

                        
                                 PERSONAJES

                                    ¿COMO SON?


                                PRINCESA



                      ATILIO RUBINATO  (príncipe)              



                                      OGRO






VIERNES 15 DE MAYO

5)RELEE EL CUENTO Y RESPONDE     V   O   F:

·          RICARDO MARIÑO DESCARTO LLAMAR A LOS BOMBEROS                                   ____                  

·          EL ESTABA ESCRIBIENDO UN CUENTO SOBRE UN OGRO                                      ____ 

·          RUBINATO ACEPTO HACER DE PRINCIPE                                                                 ____

·          EL PRNCIPE APARECIO CON SU CAPA ROJA Y SU CABALLO NEGRO                     ____


·          EL CABALLO RESCATO A LA PRINCESA                                                                    ____


·          EL OGRO QUERIA COMERSE A LA PRINCESA.                                                       _____